Aparthotel Adagio Marseille Timone
Estratégico enclave en pleno corazón de Marsella
Tarifa membros -5%
Estratégico enclave en pleno corazón de Marsella
Tarifa membros -5%
A poca distancia del centro de la ciudad y del Vieux-Port
Tarifa membros -5%
Planet 21 Gold
Tarifa membros -5%
El archipiélago de las Islas del Frioul se encuentra situado a corta distancia frente a Marsella y forma parte integrante de la ciudad, pues este constituye un distrito de pleno derecho. Si la más conocida es la isla de If, donde se encuentra el castillo del mismo nombre, las otras dos islas principales son Pomègues y Ratonneau.
A un cuarto de hora de barco saliendo del Puerto Viejo de Marsella, el puerto del Frioul es la puerta de entrada principal de estas islas salvajes de magníficos paisajes. El Dique de Berry conecta las dos grandes islas, donde solo una centena de habitantes residen durante el año. Lugar emblemático de la ciudad focense, el archipiélago del Frioul presenta un carácter realmente exótico y ofrece una verdadera bocanada de oxígeno y de tranquilidad. El Parque Marítimo de las Islas del Frioul permite en la actualidad preservar el patrimonio excepcional del archipiélago.
Cerca del puerto, las calas de Saint-Estève y de Morgiret permiten tomar el sol y bañarse en un agua clara y poco profunda. La cala de Ratonneau, más difícilmente accesible, es más tranquila y le permite disfrutar de un punto de vista excepcional de la rada marsellesa. La cala de Crine, descrita como la más bella de las islas del Frioul, se merece su sobrenombre de la pequeña Tahití. De hecho, las aguas son de tal azul turquesa que uno se queda atónito. ¡Pero se lo merece porque también es la más alejada del puerto!
Visite la fortaleza del Castillo de If, monumento nacional mundialmente conocido. De hecho, el Castillo de If es famoso por su prisión, lugar de encarcelación del famoso conde de Monte Cristo, el popular personaje literario de Alexandre Dumas. Disfrute sin reservas de sublimes fondos marinos haciendo buceo de superficie y de magníficas playas y otras caletas. Recorra a pie este verdadero remanso de paz, donde los vehículos están prohibidos: el relieve de las islas forma un terreno propicio para pasar.